Las familias de Reus piden una mejor limpieza, sombra y diversidad de juegos en los parques

El caluroso verano obliga a padres y madres a buscar espacios con árboles o estructuras que hagan algo llevaderas las altas temperaturas. Los usuarios reclaman más mantenimiento

30 julio 2022 20:07 | Actualizado a 31 julio 2022 17:33
Se lee en minutos
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Las altas temperaturas no frenan a unos niños y niñas dispuestos a aprovechar sus vacaciones. Una de las actividades estrella es pasar la mañana en uno de los más de 70 espacios habilitados con toboganes, columpios o mecedores en la ciudad, aunque el calor limita muchas de estas áreas de juego públicas. Uno de los lugares que más tregua da a pequeños y mayores es el Parc Sant Jordi, donde los árboles cobijan a las familias. Allí acude Oriol Corb, reusense que viene de Sant Cugat con su mujer y dos hijos. «Estamos de vacaciones y hemos salido porque los niños necesitaban desbravarse» comenta, «y este parque está muy bien, a diferencia de los otros, este tiene mucha sombra».

Otro padre en el mismo espacio es Juan Perucho, que, desde la zona de camas elásticas del Parc Sant Jordi coincide en la tranquilidad de uno de los pulmones verdes de la ciudad. Asegura que «la oferta es buena pero, en verano, sobre todo hay muchos sitios donde no encuentras sombra. Por la mañana prácticamente solo se puede venir aquí». «Mi hija tiene un tono de piel muy claro y no me quiero arriesgar, aunque vaya preparado. Y esto es como un pequeño bosque», añade.

«Algunos parques están sucios. Parece que no piensan en las niñas y niños algo más mayores, de entre 6 y 10 años»
Beni Soler

La familia frecuenta también el parque de Misericòrdia en invierno, pero remarca que durante estos meses resulta complicado estar más de una hora. Otro factor que destaca es la vertiente social de estas áreas de juego, ya que para su hija «es una experiencia nueva compartir el parque, va a empezar P3 y ahora se encuentra con muchos niños y niñas que antes no había visto. Hasta lo pide ella ahora, venir al Parc Sant Jordi, y nos desplazamos desde el Carrilet andando». El parque, construido en 1979, es una de las principales zonas verdes del centro de la ciudad, ubicado dónde anteriormente estaba la Estació del Nord, con áreas pensadas para mayores.

Aparte de los parques más concurridos por los más pequeños, hay otras zonas que no son aprovechables, como indica Beni Soler, abuela de dos niñas. «Algunos están sucios, se nota que no los cuidan. Hay varios por toda la ciudad que deberían estar mejor, como el de la Fumera. Antes, a mi nieta le encantaba, pero con la nueva reforma pensada para niños pequeños se ha cansado, y ahí ya no vamos. Ella tiene 6 años y dice que se aburre, que no disfruta», indica. Afirma que con el área anterior «subía y bajaba, no paraba. No piensan en la franja entre 6 y 10».

«La oferta de espacios es buena, pero en verano sobre todo hay muchos sitios donde no encuentras sombra»
Juan Perucho

Uno de los espacios lúdicos donde más se acusa la exposición directa al sol es en el parque de Marià Fortuny. Este, con pocos árboles, luce casi desierto, a excepción de Ryan Azouzou, un niño que afirma que «me gusta mucho el parque, no hay casi sitios donde poder descansar, pero tenemos sitios para comprar y comer cerca». Aunque dice que viene casi cada día, comenta que valora muy positivamente la nueva zona de gimnasia que han instalado recientemente en la parte asfaltada.

El calor es el principal impedimento para que los padres y madres lleven a sus hijos a los parques, especialmente los que no tienen espacios donde resguardarse de las altas temperaturas. Los bancos donde se sientan los padres y las propias áreas de juego, con elementos metálicos con exposición constante al sol, impiden que se conviertan en espacios de encuentro y recreo de los más pequeños.

Temas:

Comentarios
Multimedia Diari