Mossos tiene diferentes códigos para clasificar actuaciones y la número 33 es la de situación de riesgo la que se reclaman refuerzos de emergencia en una situación de peligro.
Esta activación se produjo este domingo por la noche en el barrio de Torreforta. Una detención de un presunto okupa terminó en una protesta colectiva del barrio tarraconense hacia la actuación policial y esta presión social hacia los agentes, de paisano, obligó a descubrirse (a decir que eran policías y a enseñar credenciales e incluso el arma reglamentaria).
Llegaron los refuerzos en pocos minutos desde la comisaria de Campclar y la tensión fue bajando hasta que desapareció.
El origen de todo fue el intento de ocupación de dos personas en este barrio de Ponent. La patrulla de paisano observó como un hombre escalaba para entrar en un piso y otro vigilaba desde la calle.
Los agentes se identificaron y los dos presuntos ocupas salieron a la carrera, uno fue interceptado y detenido y el otro logró huir de los agentes. La situación, lejos de calmarse, se complicó y decenas de vecinos (que desconocían el porqué de la actuación policial) empezaron a increpar y a presionar a los agentes, que se vieron forzados a pedir refuerzos y a esgrimir de forma preventiva el arma reglamentaria.
