Un ciudadano venezolano que estaba alzando la voz en su casa porque estaba hablando por teléfono finalmente quedó detenido por la Guàrdia Urbana porque sobre él pesaba una orden de detención emitida por un Juzgado de Tarragona.
Los hechos ocurrieron poco antes de las tres de la tarde del martes. La Guàrdia Urbana recibió la llamada sobre una posible pelea en un piso situado en la Part Alta.
Dos patrullas acudieron al lugar y cuando llegaron vieron que no había ninguna pelea. Era un joven venezolano de 20 años que discutía por teléfono con su pareja.
Después de ser identificado, los agentes comprobaron que tenía una orden de búsqueda detención y presentación de este año, emitida por el Juzgado de Instrucción número 5 de Tarragona. Ante ello se procedió a su detención.