Emmanuel Macron, licenciado en Filosofía y en Ciencia Políticas, a los 38 años lanzó un nuevo partido ¡En Marcha!, cuyas iniciales coinciden con su nombre. Al año siguiente ya había ganado la Presidencia de Francia y esta semana se ha convertido en el líder de Europa.
La cumbre del G7 en Biarritz reunió: a EE.UU., con un presidente imprevisible; a Alemania, con su canciller en retirada; al Reino Unido, enferma del Brexit; a Italia, en crisis de gobierno; a Japón, Canadá y Francia, la anfitriona.
Fue un triunfo de Macron. Rebajó la tensión con China, hizo acuerdos con las tasas tecnológicas y el Amazonas, y culminó una arriesgada jugada invitando al ministro de Exteriores de Irán.
En Europa volvimos a ver a un líder, y además sensato.