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La fibra óptica tenía que llegar este verano en las urbanizaciones de Castellvell del Camp. Una larga reivindicación que, a raíz del Covid-19 y con el teletrabajo en el orden del día, se ha hecho más necesario que nunca. Pero los vecinos afectados todavía no tienen noticias de ello y están ya hartos de la situación. También el Ayuntamiento desconoce el porqué los vecinos no se pueden dar de alta. El alcalde, Josep Sabaté, explica que la instalación de fibra óptica estaría ya prácticamente lista, «lo que faltaría es dar de alta a los usuarios». Detalla que Telefónica anunció que a partir del 13 de agosto, los vecinos ya podrían empezar a darse de alta del servicio, «pero esto todavía no ha sucedido y no sé el motivo. Estoy pendiente de poder hablar con el responsable de la compañía para que aclara qué está pasando», añade Sabaté.
A pesar de todo, fuentes consultas de Telefónica han explicado al Diari que la fibra ya estaría instalada en la urbanización Els Pugets y que, este agosto, el servicio se habría ampliado a las zonas donde hay cobertura «y los usuarios ya pueden contratar el servicio desde principios de mes».
La urbanización Les Planes de Puig también dispondría de este servicio desde hace un tiempo, según las mismas fuentes de Telefónica, y la compañía también tiene previsto dar cobertura a las urbanizaciones de Flor del Camp y Castellmoster, pero en estos casos sería a finales de año.
Según la compañía, en algunas urbanizaciones ya estaría hecha la instalación«La empresa recuerda que estas son sus previsiones iniciales, pero el cumplimiento de estos plazos dependerá de la obtención de las licencias y permisos para llevar a cabo la instalación de la fibra óptica», se añade.
A pesar de todo ello, los vecinos de las urbanizaciones de Castellvell del Camp se muestran indignados. Y es que detallan que, desde hace semanas «llamamos a Movistar y nadie nos sabe aclarar nada. Unos dicen que ya hay el servicio, otros que no... No hay quien lo entienda, y la cuestión es que todavía no hemos podido contratar la fibra», exclaman, a lo que añaden: «Parecemos ciudadanos de segunda. Hace ya años que llegó la fibra óptica en el pueblo, ¿por qué todavía estamos así en las urbanizaciones? No estamos tan alejados del núcleo», recuerda David Sánchez. Este vecino de Castellmoster calcula que hay, aproximadamente, 500 familias afectadas de seis urbanizaciones distintas, «y con las deficiencias de la cobertura y sin fibra óptica se hace prácticamente imposible teletrabajar o que nuestros hijos estudien a distancia».
Sebastià, vecino que vive entre Flor del Camp y Castellmoster, describe que, en su caso, no tiene cobertura «pero hice un apaño para, al menos, poder llamar con el móvil, aunque es algo muy precario». Recuerda que en las urbanizaciones «pagamos también los impuestos, pero hace 30 años que vivo aquí y jamás he visto ninguna mejora. Y lo de la fibra óptica es ya demasiado. Entiendo que es un problema de la compañía, aunque desde el ayuntamiento se podría hacer más presión», opina.
Por su parte, el alcalde Josep Sabaté reconoce que la fibra es prioritaria y que es un problema, «más aún ahora, con la crisis del coronavirus y el teletrabajo en el orden del día». Asegura, pero, que desde el consistorio se ha trabajado para solucionar la problemática «y hemos facilitado en lo posible todo lo que necesitaba la compañía», añade.
