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El Ministerio de Defensa saca a subasta parte de las casas de la aviación de Reus

Media docena de pisos con entre 220 y 114 metros cuadrados y en la plaza de la Llibertat se ofrecen a partir de 152.000 euros

06 agosto 2023 21:38 | Actualizado a 07 agosto 2023 07:00
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El Instituto de Vivienda, Infraestructura y Equipamiento de la Defensa (INVIED) ha sacado a subasta media docena de pisos ubicados en el número 5-7 de la plaza de la Llibertat. Se trata de parte de las conocidas popularmente como casas de la aviación, que operaron tiempo atrás como residencias del personal del Ejército del Aire que servía en la base de Reus. Con el paso de los años, ese uso se fue extinguiendo y el Ministerio de Defensa las ofrece ahora al público en general.

Las viviendas son muy amplias, con superficies de entre los 220 y los 114 metros cuadrados –tres alcanzan los 167–, y se localizan en pleno centro de la ciudad.

La mayor de las seis que buscan comprador, de 220,29 metros, dispone de recibidor, salón, despacho, comedor, cinco dormitorios, cocina, un cuarto de baño y un aseo. También incluye trastero, según la información detallada que difunde el INVIED a través de su página web. Su precio de salida está fijado en 308.694,55 euros en primera subasta, 262.390,37 en segunda y 223.031,81 euros en tercera instancia.

Por otro lado, el inmueble más pequeño de entre los de este paquete cuenta con 114,83 metros cuadrados que están distribuidos en recibidor, salón-comedor, dos dormitorios, cocina, un cuarto de baño y un aseo. Sale a partir de 152.007,84 euros, con 129.206,66 en segunda subasta y 109.825,66 euros en tercera. Todos se levantaron con solado de baldosa cerámica, falso techo de yeso –la altura es de unos tres metros– y carpintería de madera en las puertas y las ventanas.

El estado de las viviendas es diverso y las hay que necesitan someterse a reformas en profundidad para poder ser habitadas, tal como especifican los pliegos técnicos que rigen el proceso. El edificio del número 5-7 tiene un total de ocho plantas, con uno o dos domicilios en cada una, ascensor, patio interior y exterior y un acceso principal y otro para vehículos.

La fecha límite para que quienes aspiren a hacerse con un piso presenten documentación y ofertas es el 8 de noviembre a la una del mediodía, y el acto de apertura de sobres tendrá lugar el 29 de noviembre en Madrid.

Los inmuebles de la plaza de la Llibertat llegan a subasta pública con proposición económica al alza tras haber pasado en varias ocasiones por concurso entre trabajadores de Defensa sin encontrar titular. En este nuevo escenario, si no se venden a la primera –si la subasta inicial se declara desierta–, el precio irá descendiendo progresivamente, y de ahí los tres importes que se prevén para cada vivienda. En el caso de que todas ellas se colocaran por el tope que se ha marcado, el Ministerio ingresaría algo más de un millón de euros.

El INVIED tiene en estos momentos pisos a subasta en Reus, León y Calatayud. Visitarlos es posible a partir del 4 de septiembre y hasta que haya finalizado el plazo de presentación de licitaciones, siempre previa cita concertada y según disponibilidades de las correspondientes Áreas de Patrimonio y Oficinas Delegadas de las Subdelegaciones de Defensa. Para Reus, es la de Barcelona.

Bloque con historia

Dos décadas atrás, el Ayuntamiento de Reus había solicitado recuperar y revertir en la ciudad las casas de la aviación, que se construyeron en solares municipales cedidos en 1946 al antiguo Instituto para la Vivienda de las Fuerzas Armadas (INVIFAS) con el objetivo de que albergasen a militares. Lo había hecho precisamente al considerar que tanto el bloque de la Llibertat como un segundo edificio en la calle Gaudí habían perdido su función original –la de alojar a cargos de la base aérea reusense–, que empezó a reducirse entre 1996 y 1999.

El INVIFAS desestimó la petición del consistorio, formulada en 2003 «al haber desaparecido el destino para el que fueron cedidos» los terrenos, y el gobierno municipal optó por recurrir. En sentencia firme, la Audiencia Nacional determinó que el Ayuntamiento debería haber pedido la reversión antes, cuando estuvo al corriente del cambio de situación de los inmuebles, y que lo hizo fuera de plazo.

Desde entonces, el Ministerio ha llevado a cabo concursos para irse desprendiendo de los pisos y ha vendido algunos. Ahora, la subasta abre una oportunidad pública de acceder a ellos.

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