Los dueños de la clínica Fàbregas de Reus insisten en que el CMQ debe irse en junio

Niegan que estén negociando con el centro una prórroga de su estancia y amenazan con un demanda de desahucio

19 mayo 2017 16:31 | Actualizado a 21 mayo 2017 14:33
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Los dueños de la antigua clínica Fàbregas, alquilada desde 1998 al Centre Mèdic Quirúrgic de Reus (CMQ), insisten en que la fecha límite para que este centro médico abandone las instalaciones es el próximo 14 de junio. Fuentes de la propiedad del edificio han asegurado rotundamente al Diari que «el CMQ tiene que irse de nuestras instalaciones en junio» y también han desmentido que «estemos negociando con los servicios jurídicos del CMQ poder alargar unos meses la ocupación», tal y como aseguró el pasado lunes el alcalde de Reus, Carles Pellicer, durante la rueda de prensa en la que confirmó que la mayoría de servicios y personal del Centre Mèdic Quirúrgic se trasladarán al viejo Hospital Sant Joan.

En este sentido, los propietarios del edificio que albergó la clínica Fàbregas afirman que «es totalmente falso que estemos negociando una prórroga del alquiler. Es más, estamos preparando una demanda de desahucio por si llega el día y no se han ido». Los dueños de las instalaciones de la calle Gaudí recuerdan que «en septiembre del año pasado, el CMQ promovió una reunión con nosotros, con la presencia del Col·legi de Metges de Tarragona, para intentar encontrar una salida lo menos traumática posible. En esa reunión nos volvimos a citar para la semana siguiente para que el CMQ nos fijase lo que ellos querían. Pues bien, a los pocos días recibimos una llamada del Col·legi de Metges diciéndonos que la reunión se había anulado. Desde entonces no hemos vuelto a hablar ni negociar nada».

Desde la propiedad de la antigua clínica Fàbregas también están muy molestos con algunos de los motivos que el pasado lunes adujeron el alcalde Pellicer y la concejal de Salut, Noemí Llauradó, sobre la marcha del CMQ del edificio de la calle Gaudí. «Dicen que se van porque el contrato de alquiler ha finalizado. Eso es falso, porque no estamos ante una finalización del contrato, sino ante una rescisión anticipada, estipulada y pactada en el contrato». Respeto a las condiciones económicas «inasumibles», por parte del Ayuntamiento de Reus, que los dueños de la Fàbregas habrían impuesto al CMQ, tal y como aseguran el propio consistorio, la abogada de la familia Fàbregas, Gisela Trillas, asegura que «es falso. Nunca llegamos a hablar de precio de alquiler». En cambio, Trillas sí que reconoce que las discrepancias a la hora de concretar quién debía asumir el plan de inversiones que debía hacerse en el centro médico «sí que fue determinante. Nos obligaban a firmar una cláusula que aseguraba que si rescindíamos el contrato de alquiler con ellos nos teníamos que hacer deudores de las obras, a lo que nos negamos rotundamente».

Sin poder entrar

Los propietarios de las instalaciones presentaron hace pocos días una medida cautelar en los Juzgados de Reus para poder entrar en el edificio, algo que no habrían podido hacer en reiteradas ocasiones desde el pasado verano. De hecho, en agosto del año pasado, el CMQ Reus comunicó a la familia Fàbregas que, para entrar en su edificio, tenían que avisar con 48 horas de antelación y siempre identificando a la persona que iba a entrar y el motivo. Los dueños habrían intentado entrar en varias ocasiones, sin éxito, en el edificio, por lo que finalmente han decidido presentar esta medida cautelar.

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