En los últimos siete días se han producido dos asaltos a camiones en carreteras catalanas: el 24 de abril en las afueras de Montblanc y el pasado lunes, durante el apagón eléctrico, en un polígono industrial de Celrà (Girona). En ambos casos, los Mossos d’Esquadra han detenido a una persona y están investigando si existe una relación entre los hechos y cuál es el motivo de estos robos con violencia.
El más reciente ocurrió el lunes en el polígono de Celrà. Dos individuos disfrazados de policías asaltaron a punta de pistola a los conductores, los esposaron y robaron el vehículo.
El camión fue localizado posteriormente en Esparraguera, en la comarca del Baix Llobregat, y un hombre fue detenido, aunque no se le ha vinculado directamente con el asalto. Se le acusa de hurto de uso de vehículo. No se halló nada sospechoso en la carga, pero no se descarta una posible conexión con el narcotráfico.
El primer asalto se produjo en Montblanc, el 24 de abril, cuando un hombre disparó desde un coche a un camión para obligarlo a detenerse. El sospechoso fue perseguido por los Mossos, que activaron un operativo y lo arrestaron tras una persecución a alta velocidad por la AP-7. El detenido tenía antecedentes. Antes de esta persecución, otros dos coches y varios encapuchados participaron también en el intento de asalto, portando supuestas placas policiales falsas y armas de fuego.
La investigación policial sigue en marcha para esclarecer si se trata de asaltos vinculados o hechos independientes. Lo que parece claro es que en ambos casos los camiones llevaban matrícula de Marruecos, y en el primero de ellos el vehículo circulaba vacío por la N-240 cuando fue interceptado sin éxito en las afueras de la capital de la Conca de Barberà