Tarragona avanzará las multas de la Zona de Bajas Emisiones: sanciones de 200 euros

Tarragona adelantará las primeras sanciones de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), de manera que se implantarán conjuntamente con el inicio de la ZBE, el 31 de diciembre de 2025. A partir de ese día, se activarán las multas a los vehículos más contaminantes: aquellos que no dispongan de las etiquetas 0, ECO, C o B. Tan solo se librarán aquellos que estén domiciliados en la ciudad de Tarragona (e inscritos en un registro municipal), a los que se les da un año más de margen: no pagarán multas hasta el 31 de diciembre de 2026. El pleno de este jueves vota aprobar la ordenanza definitivamente.

En un inicio, tal y como se anunció, no se penalizaría a nadie durante el primer año y, a partir de 2027, se valoraría cuándo se activaban las sanciones. No obstante, el motivo que ha provocado este cambio son los requisitos para poder optar a las ayudas que posibilitan la reducción del 50% en el precio de los abonos del transporte público, entre otras rebajas.

¿Cómo queda todo?

Para poder acceder a estas ayudas, el Ejecutivo español requiere que la ciudad tenga una ZBE "implantada de forma efectiva o del compromiso de que la van a implantar de forma efectiva durante 2025". Y uno de los factores que marcan esa implantación son las multas.

De esta forma, la ZBE se dibujará de la siguiente manera. Su perímetro recorrerá el área delimitada por la avenida Vidal i Barraquer, la avenida Argentina, la avenida Catalunya, la calle Reina Maria Cristina, el paseo Torroja, el paseo Sant Antoni, el vial William J. Bryant, el paseo de Espanya, la calle Comerç y el Moll de Costa. Por estas vías, se podrá circular sin restricciones.

El tiempo de aplicación será entre las 7 y las 19 horas de todos los días laborables (lunes a viernes) que no sean festivos. Durante los dos primeros años, los vehículos que podrán acceder, circular y estacionar en la ZBE serán los que tengan etiqueta 0, ECO, C o B, además de las bicicletas y los vehículos de movilidad personal. Se calcula que son alrededor de un 75% de todos los vehículos de Tarragona.

Durante 2026, los residentes en la ciudad de Tarragona no tendrán ninguna restricción (si se incluyen en el registro municipal que se creará) y, a partir de 2027, los que estén censados dentro de la zona de la ZBE podrán entrar y salir sin problemas, así como aquellos vehículos que se dirijan a parkings privados (en propiedad o alquiler) o públicos en el interior de la zona.

En los dos primeros años habrá más excepciones, hasta 44, y los que cumplan ciertos requisitos podrán solicitar una autorización continuada puntual a pesar de no tener etiqueta. Algunos de estos requisitos son que los coches sean de personas con movilidad reducida, de personas con bajas rentas, de servicios municipales o de transporte de mercancías.

Para los automóviles que no puedan acceder y no estén domiciliados en Tarragona, habrá multas ya en 2026, mientras que a las vecinas y los vecinos de la ciudad se les dará un año más de excepción. A partir de 2028, los vehículos con la etiqueta B ya tampoco podrán entrar, con lo cual tan solo serán aceptados aquellos con el distintivo 0, ECO y C.

Las infracciones

Tal y como indica el consistorio, tendrá la consideración de infracción grave el no respetar las restricciones de acceso, circulación y estacionamiento establecidas en la ZBE. Las infracciones tipificadas se sancionarán con el importe que se prevé para aquellas calificadas de graves, que, según el real decreto, es de 200 euros.

La ordenanza municipal establece que las sanciones podrán incrementarse en un 30% en caso de reincidencia de la persona responsable. Se entiende que hay reincidencia cuando se ha cometido, en el plazo de un año, más de una infracción de la misma naturaleza.

Las ayudas

La resolución ministerial que ha provocado el cambio convoca la concesión de determinadas ayudas directas al transporte terrestre de viajeros. Teniendo en cuenta que las comunidades autónomas y entidades locales deben financiar, con cargo a sus propios presupuestos, un descuento de, al menos, el 20% en el precio de los abonos y títulos multiviaje distintos del infantil y juvenil –excluidos el billete de ida y vuelta y los títulos turísticos o de cualquier naturaleza similar–, las ayudas que se contemplan entre el 1 de julio y el 31 de diciembre son diversas.

Incluyen la gratuidad a la población infantil hasta los 14 años y la reducción del precio de los abonos y títulos multiviaje en un porcentaje mínimo del 50% del importe de la tarifa en abonos joven y títulos multiviaje joven y del 20% para el resto de personas. De este modo, la cuantía total que podría ser otorgada a las corporaciones locales para cofinanciar estos servicios es de 120 millones de euros, distribuidos entre 2025 (90 millones) y 2026 (30 millones).

El Ayuntamiento de Tarragona ya ha comunicado que se acogerá a esta línea y que mantendrá hasta final de año la rebaja del 50% en el precio de sus abonos. Durante los últimos tres años, el Estado ha financiado el 30% del coste, mientras que los ayuntamientos suplementaban el 20% restante para reducir a la mitad la tarifa que pagan los viajeros del bus por la adquisición de sus títulos.

Ahora, en cambio, el Gobierno central ha decidido rebajar su aportación al 20%, y pide a las administraciones locales que, como mínimo, aporten un 20% para reducir la tarifa en un 40%. Sin embargo, el consistorio tarraconense apuesta por asumir íntegramente el 30% que queda para seguir manteniendo intactos los precios actuales.