El Ayuntamiento de Tarragona actuará de manera inmediata en uno de los monumentos de origen judío que quedan en pie en la ciudad y que su estructura original es del siglo XII.
Se trata de preservar Ca la Garsa, construcción medieval declarada Bien Cultural de Interés Local. El consistorio ha explicado en el día de hoy que el martes 31 de julio se observó que se han abierto los testigos instalados en las grietas de los muros, puestos en 2012, para controlar la evolución de las grietas.
Se ha procedido a cerrar provisionalmente parte de la plaza Mare de Déu dels Àngels y la parte de la calle Talavera con el fin de garantizar la seguridad. De manera inmediata se hará una actuación de emergencia de la zona afectada para dejarla en condiciones de seguridad.
Posteriormente, se analizará y se tomarán las medidas pertinentes para garantizar la conservación de Ca la Garsa, donde se aprecian un conjunto de arcos diafragmáticos medievales construidos con sillares.
¿Qué debió ser Ca la Garsa?
La función que tenía este inmueble todavía no está claro a día de hoy. La última fase ocupacional del inmueble se desarrolló hasta el siglo XV, cuando los judíos fueron expulsados por los Reyes Católicos.
Aunque unos historiadores ubicaron la sinagoga en ese inmueble, hay otras líneas de investigación que descartan que el edificio fuera realmente un centro de culto. No obstante, el libro El Call Jueu de Tarragona. Estudi històric de l’edifici de Ca la Garsa i el seu entorn, de los autores David Bea, Sergi Navarro y Aleix González, en la estela de lo aportado por el estudio de Marta Serrano (2007), señala que «sea como sea, las características arquitectónicas, levantada con sillares trabajados, lo definen como un edificio de cierta entidad».
La posibilidad de que Ca la Garsa fuera una sinagoga parece más improbable después de analizar la estructura: los arcos y la propia ranura de la puerta descartarían esta posibilidad para Ca la Garsa a pesar de que el nombre de la plaza –Mare de Déu dels Àngels– viene dado por una capilla votiva levantada en ese punto del Call para contrarrestar la heregía de los judíos y de ello nació una interpretación errónea de que el templo se levantó encima de la sinagoga.