«¡Somos los del Sí y los del 1 de octubre!»

El antiguo espacio convergente busca relanzar su vuelo en Tarragona. Después de ir perdiendo altura desde 2007 con la marcha de Joan Miquel Nadal –y estrellarse en 2015 con el fallecido Albert Abelló, cayendo hasta los tres concejales–, los neoconvergentes aspiran ahora a recuperar parte del terreno pedido en los últimos tiempos después de haber reiniciado el partido de la mano de Carles Puigdemont. Precisamente, Junts per Tarragona espera beneficiarse del efecto que el candidato para las Europeas pueda tener este domingo para frenar el voto útil que, el pasado 28 de abril, perdió en beneficio de Esquerra Republicana.

Ahora, sin embargo, los de Puigdemont aseguran tener mejores sensaciones, después de haber pasado ya buena parte de la campaña y varios debates electorales, en los que Dídac Nadal ha buscado reiteradamente el uno contra uno con Ballesteros. «Tarragona necesita un cambio generacional», reivindicó el alcaldable al ritmo del rock catalán que los trescientos asistentes tuvieron como telón de fondo en el acto que se llevó a cabo en el Teatre Metropol, con tres esteladas colgadas, un hecho que se evitó en la campaña de hace cuatro años.  

Durante su intervención, Nadal expuso que «Tarragona no tiene gobierno» y enfatizó la «necesidad que tenemos de recuperar la ciudad con un cambio profundo» que la convierta en una localidad «abierta, moderna y que ilusione», «sin proyectos faraónicos, con más zonas verdes y una policía de proximidad que esté al lado de su gente». 

Puigdemont aparte, el peso pesado del acto de ayer fue la presencia del President Quim Torra, quien se preguntó: «¿Dónde ha estado Tarragona cuando era necesario que estuviera presente?». Asimismo, el máximo representante del Govern envió otro dardo al alcalde Josep Fèlix Ballesteros (PSC), manifestando que «espero que Dídac Nadal sea alcalde para que venga un alcalde de Tarragona a la Generalitat», dijo en referencia a las diferencias que Ayuntamiento y Govern mantienen desde hace años. 

El President, que justo ahora cumple un año en el cargo, remarcó que «necesitamos un ayuntamiento que esté al lado del país», y reivindicó que «somos los que estamos en el lado bueno de la historia; los del sí y los del 1 de octubre», en otro dardo... esta vez a Esquerra.