Condenado un conductor que mató a un niño de 9 años e hirió a padres y hermana en Tarragona

Han tenido que pasar once años y medio para que se dictara sentencia respecto a un accidente mortal ocurrido en el término municipal de La Secuita en el que perdió la vida un niño de nueve años y sus padres y su hermana resultaron heridos graves. El conductor iba bajo la influencia de sustancias estupefacientes y por encima del límite de velocidad. La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Tarragona lo ha condenado a once meses de prisión y a la retirada del carnet de conducir durante once meses y medio como autor de un delito de homicidio imprudente y de tres de lesiones imprudentes.

El accidente se produjo a las seis de la tarde del 9 de abril de 2011. El acusado conducía un Nissan Primera con autorización de su propietario, su padre. Había ingerido hachís, que le producía disminución de sus facultades de atención, percepción y reflejos. Cuando llegó a la altura del punto kilométrico 13 de la carretera TP-2031 –de Tarragona a Santes Creus–, en el término de La Secuita, conducía a una velocidad inadecuada a las circunstancias de la vía. Ello y con sus facultades alteradas, perdió el control del vehículo e invadió el carril contrario. Por el mismo circulaba correctamente un vehículo Citroën Xsara Picasso. Iba conducido por un hombre, «que no pudo hacer nada para evitar la colisión frontal excéntrica entre ambos vehículos».

En el Picasso viajaban, además del conductor, su esposa, la hija del matrimonio –ambas resultaron heridas graves, al igual que el hombre– y el hermano de esta, de nueve años, que falleció en la colisión.

El acusado presentaba diferentes signos externos: actitud relajada, mirada perdida, pupilas dilatadas, no era consciente de la gravedad del accidente, se mostró desinteresado y apático, no se interesaba por lo que allí ocurría. Fue sometido a la prueba de dogas y dio positivo en cannabis, que después fue confirmado en la analítica terapéutica practicada en el Hospital Joan XXIII.

Inicialmente, el Juzgado de lo Penal 1 de Tarragona lo había condenado a cinco meses de prisión, los mismos que los de retirada del carnet. Apreciaba las atenuantes de dilaciones indebidas muy cualificadas –por la tardanza en llegar el caso a juicio–, la de confesión y reparación del daño. Tanto la acusación particular como la Fiscalía presentaron recurso de apelación. Se mostraban disconformes con la apreciación de atenuante de reparación del daño ya que quien pagó había sido la compañía de seguros, no el acusado. Y tampoco la confesión, ya que nunca reconoció la ingestión previa de marihuana. Y la Audiencia ha dado la razón a la acusación.