Los vecinos del edificio ubicado en el número 18 de la Calle Riu Llobregat de Campclar que sufrió un incendio en el cuarto de contadores el pasado sábado 23 de marzo siguen sin electricidad. El siniestro se produjo de madrugada y calcinó completamente el cuadro eléctrico lo que dejó al edifico a oscuras desde entonces.
Isabel Trujillo, que se ha convertido en portavoz de los vecinos, asegura que «nos sentimos abandonados, aquí no se ha reubicado a nadie». Recuerda que en el edificio de 24 viviendas viven muchas familias con niños y también personas mayores que se han pasado toda la Semana Santa sin electricidad «y la situación ha sido peor en estos días nublados y de lluvia... La gente se está alumbrando como puede, con velas, linternas o lo que sea; al final es un peligro».
Se da la circunstancia de que la mayoría de los pisos son propiedad de fondos de inversión y se encuentran ocupados. Hay además, algunos propietarios particulares. La dificultad está en que se necesita que cada piso aporte 1.800 euros para poder comenzar las obras. «Hemos dicho que hasta que los bancos no paguen nosotros no lo haremos», señala Trujillo.
Otra opción que han mirado es la instalación de un generador, pero también debería correr a cargo de los vecinos.
El incendio dañó, además, parte de las tuberías, por lo que inicialmente se quedaron sin agua. Esta avería la arreglaron los propios vecinos comprando ellos los materiales. Además, tampoco tienen gas por otra avería que, aseguran desde la compañía de suministro, también debe correr a cargo de la comunidad.
Consultados sobre el tema, desde el Institut Municpal de Serveis Socials de Tarragona señalan que ayer comenzaron a citar a las familias para hacer una exploración en profundidad y evaluar las diferentes necesidades. Las primeras en citar ayer fueron las 9 familias con menores a cargo.
