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Después de semanas de protestas de los agricultores franceses, alemanes, portugueses e italianos, el estallido por la indignación en el campo también llega a Catalunya y a las comarcas de Tarragona. Este martes, 6 de febrero, el sector agrario saldrá a las carreteras para reclamar soluciones ante una situación que consideran “insosteinble”.
“Nos encontramos con un exceso de burocracia, una mala reforma de la PAC, una ley de la cadena alimentaria que no nos arregla nada; y sumamos los agravantes de la sequía y el aumento de costes que hemos vivido estos últimos años”, justifica el responsable de organización de Unió de Pagesos y agricultor del Priorat, Carles Vicente.
Distintas organizaciones sindicales harán cortes y ralentizarán la circulación en las principales vías catalanas de las cuatro provincias. En el caso de Tarragona, los payeses concentrarán sus tractores en l’Aldea, en la AP-7, a partir de las 11 de la mañana; en Montblanc, en la AP-2, desde las 9; en Vila-rodona; y harán marchas lentas por la N-420, entre Falset y Móra d’Ebre, y por la misma carretera desde la capital de la Ribera d’Ebre hasta Gandesa. También se prevén afectaciones en la C-12.
“No se trata de hacer movilizaciones para que la ciudadanía se sienta perjudicada, sino que es una concentración que persigue que nuestros problemas entren en la agenda política del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación”, advierte Vicente.
“No le garantizo que, de aquí a una semana, si las cosas no van bien, cortemos el abastecimiento en los principales centros de distribución”, plantea el coordinador territorial del sindicato en el Camp de Tarragona, Pere Guinovart.
La protesta en el Port de Tarragona
La organización agraria Unión de Uniones, con representación en toda España, ha convocado concentraciones en tres puertos de entrada de mercancías: el miércoles 7 de febrero en el de Castellón y el próximo martes, 13 de febrero, en los de Tarragona y Santander.
No obstante, el Port de Tarragona aclara que sus importaciones «no afectan al campo catalán: se importa fruta tropical que no se produce en Catalunya; los cereales que entran complementan la cosecha nacional en tiempos de sequía y se exportan reses de ganado de explotaciones catalanas».
Además, asegura que comparte «la preocupación del sector primario de Catalunya por su futuro y está abierto a colaborar con las organizaciones de agricultores y ganaderos, siempre que esta no afecte a su funcionamiento normal y no perjudique sus intereses y los de sus clientes».
Estas protestas de Unión de Uniones son el preludio de la gran tractorada que anunció hace casi un mes para el 21 de febrero frente a las puertas del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en Madrid. Este sindicato ya realizó allí un pequeño acto el pasado viernes durante la reunión del ministro con los representantes de Asaja, COAG y UPA. Y llevará a cabo más concentraciones en las provincias de Burgos, León, Ávila y Segovia.
