La instalación se semáforos en la travesía de la C-31 en Cunit ha generado un intenso debate entre vecinos en las redes sociales.
Esa señalización luminosa que en el municipio se reclamaba hace años para intentar incrementar la seguridad en una vía que atraviesa el núcleo urbano y por la que circulan 25.000 vehículos diarios motiva el debate entre evitar las caravanas o la seguridad para cruzar la vía.
Quienes señalan que se generarán retenciones ponen como ejemplo los semáforos de Cubelles, donde se producen caravanas especialmente los fines de semana.
Consideran que además de esas colas generarán molestias a los vecinos por ruidos y contaminación, además de las propias retenciones.
Los defensores de los semáforos argumentan la seguridad de los vecinos y recuerdan que han sido muchos los atropellos en los últimos años por la velocidad a la que circulan algunos conductores.
De poco ha servido el incremento de iluminación o las señales luminosas, por lo que consideran que los semáforos deben ayudar a reducir la velocidad y evitar atropellos, muchos de ellos en los propios pasos peatonales.
El Ayuntamiento reconoce que pueden haber caravanas, pero considera prioritaria la seguridad. En el debate vecinal se destaca que los primeros semáforos los financia la cadena que levanta un nuevo supermercado a pie de la C-31. Pero desde el consistorio señala que ese comercio motivará un gran trasiego por lo que debe garantizarse la seguridad.
En los últimos días han comenzado los trabajos para instalar dos conjuntos semafóricos. Estarán frente a la nueva superficie comercial de Esclat y que financia la empresa.
Otros tres
No serán los únicos semáforos. Habrá otros tres que colocará la Generalitat, titular de la vía. Estarán en el cruce de la calle Francesc Macià, otro a la altura de la Rambla del Prat y un tercero en la rambla de Can Nicolau.
Además se proyecta una rotonda frente al Hotel Manhatan y en los cruces peatonales que no cuenten con semáforo habrá señalización luminosa indicando el paso.
La C-31 es una barrera para Cunit y Segur de Calafell. Ambos municipios pretenden que pase a titularidad municipal para convertirla en una vía urbana a modo de especie de paseo con aceras anchas y carriles bici. Ahora es de titularidad de la Generalitat al ser una carretera de la red básica.
Es difícil que pase a los municipios ya que no hay un alternativa viaria gratuita. No obstante en Cunit recuerdan que la autopista C-32 ya es gratuita entre Cubelles y El Vendrell todo los días por lo que ya debería ser una alternativa para la circulación de paso.
Sin embargo son pocos los vehículos que utilizan la C-32 para ese desplazamiento por el Penedès Marítim y la C-31 sigue colapsada principalmente en los fines de semana.
