El Ayuntamiento quiere expandir sus instalaciones de placas solares y ha identificado ya entre 10 y 12 puntos de la ciudad en los que implantará el sistema. Se trata de edificios y espacios municipales «donde seguramente podremos colocar gran cantidad de placas», tal como explica el concejal de Medi Ambient, Dani Rubio, que indica que parte de estos grupos generarán «nuevas islas energéticas». Entre los edificios elegidos habrá colegios –más allá de los cinco cuyas placas ya están en proceso de licitación– y al menos en algunos de ellos «intentaremos construir ‘islas energéticas’, analizando cada caso».
«La idea es, teniendo en cuenta que las escuelas públicas están repartidas más o menos por toda la ciudad, poder poner el máximo de placas en los techos y que parte de la instalación sea para proveer y para vender energía al Ayuntamiento; pero también estamos estudiando que, si la experiencia de la comunidad energética que se ponga en marcha en el barrio Gaudí es buena y vemos que hay demanda y que incluso se ha quedado gente fuera, algunas de estas islas puedan ejercer como comunidades», explica Rubio, que especifica que «queremos ver hasta dónde podemos llegar en este aspecto, considerando que en estos momentos la demanda presenta una tendencia claramente creciente».
«Tenemos la intención de sacar adelante esta vertiente porque, cada vez más, quien tiene posibilidades de hacerlo se pone placas solares», explica Rubio, que recuerda que «la luz ha triplicado su precio y, ante esto, la gente busca alternativas, y queremos acompañarles en esta posibilidad de acabar ahorrando en la factura de la luz a la vez que potenciamos la energía de kilómetro cero y más sostenible, promovemos la autogestión del consumo y la obtención de ventajas económicas».
Sobre la comunidad energética pionera que se activará en el barrio Gaudí, «el proyecto ya ha sido presentado a la Associació de Veïns y la Junta pero sabemos que debemos hacer un desembarco más profundo y realizar una convocatoria expresa». Nos hemos aliado con una empresa que se ocupará de la diseminación en el entorno, en el radio de 500 metros que abarcaría la comercialización de energía de las placas de Mas Carandell, e informaremos a todo aquel que esté interesado en conocer cómo funciona el sistema y qué le aportaría participar en él.
