La Guardia Civil, a través de sus especialistas de la Intervención de Armas y Explosivos, ha puesto en marcha la ya tradicional campaña de Sant Joan, para velar por la seguridad de los ciudadanos, antes y durante las fiestas. Para ello, se han inspeccionado más de cien establecimientos, tanto locales de venta temporal de pirotecnia, como establecimientos permanentes, a lo largo de toda la provincia de Tarragona.
Hasta este viernes, 23 de junio, se han detectado un total de 30 infracciones a la normativa reguladora, en las que se ha intervenido material pirotécnico irregular de diferentes clases, que podría haber supuesto un riesgo futuro para los consumidores finales, detectando otra serie de irregularidades, como la venta de este material a menores de 12 años, falta o defectuosa cumplimentación de los libros y registros obligatorios o la venta de artículos pirotécnicos de la clase F1 sin comunicación previa a la Intervención de Armas y Explosivos correspondiente, tal y como ha expuesto la benemérita en un comunicado.
El material retirado por la Intervención de Armas de los establecimientos de venta, ha quedado intervenido a disposición de la autoridad competente, para su posterior destrucción en condiciones de seguridad.
Charlas a menores
Igualmente, los agentes de la Intervención de Armas, han impartido charlas enfocadas a menores, que en estas fechas también hacen uso de productos pirotécnicos, para informarles y concienciarles de los peligros de este material. Es el caso de la Intervención de Armas de Tortosa, que ha impartido esta última semana, charlas a los alumnos de varios centros educativos de l’Aldea, para prevenir un mal uso de cohetes y petardos, durante las fiestas de Sant Joan.
Una serie de diapositivas, vídeos y consejos prácticos han sido utilizados por los agentes, para informar a los menores de esos riesgos, destacando los errores más habituales que se cometen a la hora del manejo de productos pirotécnicos, recalcando las recomendaciones de seguridad que son necesarias para su uso.
Durante esta campaña preventiva, que se desarrolla en colaboración con diferentes cuerpos de Policía Local o Guardia Urbana, se realizan controles de la documentación que ampara la trazabilidad y calidad de los productos pirotécnicos y de la documentación necesaria que requieren los puntos de venta, temporales o permanentes. Así, se evita la comercialización y almacenamiento de petardos y fuegos artificiales que pueden haber evitado los estrictos controles de calidad que exige la normativa europea y la la legalidad de los puntos de venta.
Las inspecciones seguirán realizándose hasta mañana sábado, 24 de junio, coincidiendo con la finalización de las fiestas.
