El Ayuntamiento de Reus destinó 214.511,71 euros en ayudas para rehabilitaciones de edificios, el año pasado. En total, 22 proyectos se beneficiaron y las viviendas intervenidas se incorporarán a la Borsa de Lloguer del Ayuntamiento durante, al menos, cinco años y medio. Esta era la condición de la última convocatoria de subvenciones para la rehabilitación que abrió el consistorio el año pasado. El objetivo: ampliar la bolsa municipal de alquiler social y movilizar el parque de viviendas vacías, incrementando su calidad.
A la convocatoria se presentaron 31 solicitudes y fueron aceptadas 22 con un importa total concedido de 214.511, 71 euros. Así pues, cada proyecto recibió, de media, 9.750 euros. El máximo concedible eran 15.000 por vivienda –5.000 más que en la anterior convocatoria– y el valor de la ayuda no podía superar el 50% del presupuesto de la obra.
Las subvenciones eran para actuaciones de adecuación de piezas y elementos de la vivienda para obtener las condiciones mínimas de habitabilidad (también baños y cocinas); instalaciones de agua, gas, calefacción, electricidad y saneamiento; mejora del aislamiento térmico y acústico; y repaso de elementos deteriorados como pintura, suelos, puertas o ventanas. La ayuda también cubría honorarios para la elaboración y dirección del proyecto técnico y para obtener la cédula de habitabilidad y el certificado energético.
En la convocatoria anterior, de 2020, se beneficiaron nueve obras con un importe total de 78.165,51 euros. Ese mismo año, el Ayuntamiento hizo una segunda convocatoria de ayudas para la rehabilitación, pero en este caso destinadas a intervenciones energéticas y de accesibilidad de edificios de uso residencial, con 18 solicitudes aceptadas y un importe de 545.615,11 euros. Una línea que en 2023 no se abrió porque «su financiamiento está cubierto mediante las ayudas aprobadas por la Generalitat en el marco del Plan Estatal de Recuperación, Transición y Resiliencia, y el Instrumento de Recuperación Next Generation».
Por ahora, el Ayuntamiento no tiene prevista ninguna otra convocatorio, «pero tampoco se descarta», señalan fuentes municipales consultadas. De momento, «se priorizan las acciones de rehabilitación de barrios», como el proyecto del barrio Fortuny, donde el Ayuntamiento destinará este año 1,3 millones de euros en un proyecto que engloba diez edificios que ganarán en eficiencia energética y accesibilidad.
A nivel general, en Reus se llevaron a cabo, el año pasado, al menos una cincuentena de rehabilitaciones, un 23% más que en 2022. Según empresas constructoras consultadas, es un tipo de obra que ahora tiene salida porque «en Reus hay mucha demanda de alquiler, sobre todo en el centro» y mucha vivienda vacía. Sobre las ayudas, las valoran como un incentivo, pero sobre los Next Generation señalan que son trámites «muy farragosos».
