El deporte tarraconense quiere seguir celebrando éxitos como los del Calafell
y olvidar duras derrotas como las del Nàstic que se quedó a nada del ascenso
La cruel derrota en Elda vuelve a poner el foco en el técnico Raül Agné y enrarece aún más un ambiente cargado y de constantes sospechas desde el primer día
A sus 35 años el capitán del Nàstic ha completado una temporada fantástica
y solo se ha perdido un partido, aunque le queda el deseo de subir a Segunda
Lágrimas de dolor. Caen y caen en los rostros de unos aficionados granas a los que le han roto la esperanza. Es el adiós a un sueño que se ha roto en pedazos a un paso de conseguirlo.
Miles de aficionados se reunieron en la mítica plaza tarraconense y sufrieron como si estuviesen en el mismo Balaídos. Los hinchas animaron desde antes del encuentro hasta el minuto final, incluso en los momentos más duros