Irene Peña, de la tienda de moda Setdisset, de la calle Sant Pere de Calafell es una de las que ha abierto en la zona comercial de la playa. Explica que dispone de gel y en la tienda sólo entran los clientes de uno en uno.
«No se han probado la ropa porque las ventas que se han hecho han sido para regalos». Pero más allá de la caja que pueda hacerse «el abrir es para transmitir una recuperación de la normalidad». En el comercio ya hay un cartel que advierte que sólo se puede acceder de uno en uno.
En los próximos días en el local esperan dos máquinas de ultravioleta como método de desinfección que serán para la zona de probadores y para el comercio.
Pero han sido pocos los comercios de Calafell que han abierto sus puertas en el primer día que podían hacerlo con las restricciones que exige la alarma sanitaria. La mayor parte esperarán para reabrir sus establecimientos tras el obligado parón. Y el próximo 11 de mayo es la fecha esperada para abrir.
La agrupación de comerciantes Fòrum Calafell, explica que en muchos casos ha sido porque la reactivación deja muchas dudas. «Ha sido una jornada de ir a los bancos, donde han habido largas colas de comerciantes», explica Josep Soria, presidente de Fòrum.
Falta material
Pero también por una falta de material necesario como mascarillas, geles e incluso mamparas de metracrilato. La agrupación de comerciantes va a impulsar una compra conjunta para lograr mejores precios y poder tener acceso a unos productos ahora difíciles de encontrar por la elevada demanda.
Locura por una mampara
En apenas una semana han hecho 50 barreras de policarbonato y tienen otros 100 pedidos en marcha. La empresa Proycsa, en Valls, se ha adaptado a las circunstancias y fabrica el que va a ser el producto estrella de estos meses, la mampara, el actual objeto de deseo de todos los servicios.
No sale a cuenta
Pere Morales, del restaurante Pa Torrat, lo mantiene de momento cerrado. Tampoco abre para comida para llevar. «No sale a cuenta si los vecinos no pueden desplazarse a más de un kilómetro de sus casas».
En cambio Morales sí que ha abierto dos heladerías. Por la tarde. «Es un producto que va a tener más salida a las horas en las que hay desconfinamiento para algunas actividades». Morales coincide en que más que la caja «el objetivo es que los vecinos sepan que el comercio vuelve a abrir».
Ayudas
Los empresarios esperan conocer si habrá ayudas por parte del Ayuntamiento. El alcalde Ramon Ferré ya explicó que el dinero que estaba previsto para fiestas mayores y otros eventos que han quedado suspendidos se destinará a ayudas sociales y al comercio. Pero los empresarios piden concreción.
Calafell suspende todas las fiestas y destinará el dinero a ayudas sociales
Calafell cancela toda la actividad cultural y festiva del verano y destinará el presupuesto a ayudas sociales para hacer frente a las consecuencias de la pandemia del coronavirus. Hace unos días el alcalde Ramon Ferré anunció que quedaba todo suspendido hasta junio. Pero la situación ha llevado a una decisión más contundente.
Un cambio
En todo caso desde Fòrum Calafell Josep Soria destaca que la situación es dura para el comercio y que tras la desescalada va a tener que hacerse frente a la situación económica de la población y a una nueva forma de comercio.
En este sentido el Ayuntamiento ha activado una plataforma digital en la que el comercio del municipio puede mostrar sus productos, ofertas y servicios para ayudar a las ventas mientras se recupera la normalidad. Aunque posteriormente se mantendrá como un nuevo canal de venta que el confinamiento ha impuesto y acostumbrado a la población.
Calafell impulsa una plataforma digital para el comercio de proximidad
El comercio de Calafell busca nuevas maneras de llegar a los clientes y reactivarse tras el obligado parón motivado por la crisis sanitaria. Potenciar el comercio digital de proximidad frente a las plataformas de más amplio ámbito va a ser una de las apuestas.