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«Al día siguiente de anunciarse la inversión ya vinieron algunas personas al Ayuntamiento a traer sus curículums, sin saberse en aquel momento aún los perfiles que serían necesarios. La afluencia ha sido constante desde entonces. Y por mail han sido numerosas empresas dedicadas a la ingeniería, constructoras o bufetes de abogados las que nos han ofrecido sus servicios». Las palabras de la concejal de Impuls Econòmic de Mont-roig del Camp, Yolanda Pérez, definen el bullicio desencadenado en el municipio tras conocerse la llegada de ILJIN, la empresa surcoreana especializada en componentes para baterías eléctricas que el pasado 16 de mayo anunció una inversión de 600 millones de euros en la construcción de su primera planta en Europa y la creación de 500 puestos de trabajo directos.
La fábrica, que debería empezar a producir dentro de dos años, en 2024, y acapara las conversaciones en esta población de 12.700 habitantes por el revulsivo que supondrá, ha obligado al propio consistorio a mover ficha de inmediato para poder cumplir con esos plazos tan ajustados.
De hecho en el área de Impuls Econòmic del Ayuntamiento de Mont-roig del Camp se acaba de abrir una oficina específica destinada al proyecto de ILJIN y al desarrollo del polígono industrial de Els Comellarets, donde otras empresas del sector tecnológico podrían instalarse a su alrededor por el polo de atracción que representa la llegada de la companía surcoreana.
El consistorio ha destinado a esa oficina a dos de sus empleados, a dedicación completa, para facilitar todos los trámites vinculados a esta gran inversión. «No tenemos tiempo que perder y por eso nos hemos puesto manos a la obra. De entrada habrá muchísimos trámites burocráticos y administrativos para solicitar los permisos previos y dentro de un año empezarían los movimientos de tierra en el polígono», añade la propia Pérez sobre el cronograma y actuaciones a seguir a partir de ahora.
Tanto la concejal como el alcalde Fran Morancho supervisan directamente el proyecto de ILJIN que contempla una planta de 30.000 metros cuadrados en esta futura zona industrial de 44 hectáreas, de la que el Ayuntamiento cuenta ya con la titularidad del 70% de los terrenos.
Ambos ya acudieron a Seúl, junto al concejal Vicente Pérez, para participar del anuncio oficial de la inversión, junto al conseller d’Empresa del Govern de la Generalitat, Roger Torrent; luego viajaron hasta Malasia, donde la empresa asiática dispone de una planta -además de la principal en Corea del Sur- muy parecida a la que se construirá en Mont-roig del Camp.
La delegación conoció durante aquel viaje a los seis empleados de la multinacional que a finales de este mes de junio se instalarán ya en Mont-roig para trabajar ininterrumpidamente sobre el terreno en el proyecto, hasta que se construya la planta y se ponga en funcionamiento. «Estamos preparando la llegada de estos seis empleados y sus familias para que dispongan de todo lo necesario cuando estén aquí y puedan instalarse en Mont-roig o alrededores», explica Yolanda Pérez. Entre sus necesidades figuran, de entrada, desde viviendas hasta una oficina de trabajo.
El exclusivo Elecfoil
ILJIN se dedica a la fabricación del producto elecfoil, una lámina de cobre -patentada por la propia multinacional - que es más fina que un cabello humano y se convierte en un elemento básico para las baterías de litio.
La compañía eligió Mont-roig por su situación estratégica, conexiones y cercanía con la planta de Seat en Martorell, donde Volkswagen desarrollará su coche eléctrico, y la gigafactoría de baterías eléctricas que la multinacional alemana construirá en Sagunto (Valencia).
Fundada en 1968 y con sede central en Seúl, ILJIN cuenta con 1.100 trabajadores a escala internacional y diferentes áreas de negocio. Además de Volkswagen también figuran entre sus clientes LG Energy Solution, Samsung SDI o Northvolt.
