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El Reus Deportiu sumó ayer un triunfo solvente y autoritario ante el Alcoy, al que batió sin demasiadas complicaciones. El encuentro se puso muy de cara para los de Alejandro Domínguez ya de inicio. Xavi Costa abrió el marcador prácticamente en la primera jugada del partido. Era el segundo 32 y el envite se ponía con buena perspectiva para los locales, que a partir de ahí llevaron la iniciativa. Los rojinegros completaron un encuentro serio en el que la victoria cayó por su propio peso ya tras el descanso, cuando llegó la sentencia e incluso la goleada en el segundo tiempo.
La ventaja dio mucha fuerza a los de la capital del Baix Camp, que desplegaron buen juego y decisión, dispuestos a amarrar lo antes posible el triunfo. Los rojinegros encontraban espacios en ataque y hacían daño a su rival. Xavi Rubio, de penalti, amplió el marcador (2-0).
Se resistió algo el Alcoy en la reanudación, lanzando contragolpes, pero respondieron bien los rojinegros. Esta vez fue Jepi Selva quien, en carrera, marcó el tercero con una cuchara que coló la bola por la escuadra.
Era prácticamente la sentencia, aunque los alicantinos recortarían distancias poco después por mediación de Formatjé. El Alcoy se vino arriba unos instantes pero entonces fue Marc Coy quien, a once minutos del final, abortó todo amago de reacción con el 4-1. Jepi Selva, con un tanto en el último suspiro, redondeó una victoria contundente que supone un subidón de confianza para encarar el tramo decisivo de la temporada.
