El Anillo Mediteráneo de Campclar es una referencia deportiva cinco años después de los Juegos del Mediterráneo de 2018. Según los datos que maneja el Patronat Municipal d’Esports, son más de 2.000 los deportistas que cada día utilizan las instalaciones de Ponent, repartidos entre los 1.200 de las 36 entidades que tienen horas de entrenamiento en instalaciones como el Palau d’Esports, el estadio de atletismo o la piscina, además de otros 848 abonados del Patronat d’Esports que entrenan por libre en el complejo.
Justo hoy se cumple un lustro del legado que dejó la competición internacional que acogió la ciudad entre el 22 de junio y el 1 de julio de hace cinco años. Tras nueve días de intenso uso, y después de una inversión global de 37 millones de euros, el legado para la ciudad en Campclar se empezó a materializar desde el día siguiente: el lunes 2 de julio de 2018.
ERC: «Evitamos su privatización»
En este tiempo, el Ayuntamiento ya ha invertido más de 2,1 millones para reforzar sus prestaciones iniciales y adaptarlo para que forme parte del día a día del tejido deportivo de la ciudad. En la entrevista que acompaña esta página, el concejal de Esports –Berni Álvarez (PSC)–, recalca que, hasta la fecha, «no se ha sacado todo el rendimiento posible» al complejo deportivo, y anuncia que el objetivo de este próximo mandato es «celebrar un evento de alto nivel cada año», para impulsar el Anillo como eje del turismo deportivo y consolidar el sector como un «motor económico de la ciudad».
Por su parte, la portavoz de ERC –Maria Roig– se muestra muy crítico con la gestión de los Juegos. «El gobierno socialista politizó un evento deportivo que fue un fracaso, dando una imagen distorsionada y falsa de Tarragona, escondiendo nuestra cultura y las entidades. La ceremonia inaugural fue vergonzosa, con el ejército contando con un papel que no le tocaba. El resultado de todo ello fueron todas las gradas vacías, una ciudadanía que no se había hecho suyo este evento y un retorno que no se ha notado». Pese a ello, desde ERC –el partido que ha gestionado el legado durante cuatro años– se destaca que «lo mejor, aparte de la implicación de los voluntarios, son las instalaciones que quedaron, cuya gestión evitamos que se privatizara. A todo ello, cabe recordar que fue en el pasado mandato cuando el gobierno de Ricomà desatascó la chapuza heredada del Palau d’Esports, no sin los impedimentos del PSC, y el resultado de este proceso es espectacular. Ahora tenemos un Anillo lleno de vida en el que cientos de deportistas entrenan cada día», afirma Roig.
394.000 € en marcha en el Palau
En global, la instalación que cuenta con una mayor intensidad de uso por parte de los deportistas es el estadio de atletismo, cuya reforma implicó un gasto de 3,3 millones. En este equipamiento entrenan cada día 350 atletas de cinco entidades (Club Atletisme Tarragona, Nàstic, Aula Magna, Allibera Adrenalina y Trail Tarraco), además de algunas Ampas y escuelas ocasionales.
Otro recinto con una notable actividad es el Palau d’Esports, cuyo coste fue de 18,4 millones de euros a cargo de la Generalitat. Está bierto a los clubes desde el pasado mes de octubre, tras estar prácticamente cerrado durante cuatro años. Este pabellón alberga cada día a unas 250 personas de diez clubes: CBT, ADT, TGN Bàsquet, Kalos, Volei SPSP, Nàstic, Handbol Tarragona, Bàsquet SPSP, Ampa El Carme y Teresianes. Actualmente, está en licitación el nuevo parqué por un valor de 315.000 euros y, a corto plazo, también se apuesta por invertir otros 79.000 entre los 44.000 euros de las cortinas y los 35.000 del protector. En total, pues, hay 394.000 euros en marcha.
La tercera gran pata de las instalaciones es la piscina Sylvia Fontana, cuya construcción la pagó el Estado con una inversión de 1,7 millones de euros. Posteriormente, el consistorio asumió los 261.000 euros que costó la instalación de la caldera de biomasa (237.000) y la manta térmica (24.000). A día de hoy, este recinto es usado por los clubes de natación Tarraco, Cambrils, Vila-seca, Salou y Tolosa, además del Club de Vela Platja Llarga. En total, hay 151 personas al día, que se suman a las 160 diarias con siete entidades que usan la piscina interior y a las 144 con 11 entidades del pabellón de 1985, que en 2017 fue remodelado con una inversión de 1,1 millones de euros.
A todo ello, hay que sumar los 60 deportistas diarios que usan un campo de rugby que, este 2023, tiene pendiente una inversión de medio millón de euros para colocar el césped artificial y consolidar, de esta forma, el entorno deportivo de Ponent como un nuevo centro neurálgico de la ciudad.
