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Esquerra Republicana se convertirá en pocas semanas en la primera formación que tendrá alcaldable en Tarragona de cara a las elecciones municipales de mayo de 2023. Con los aires favorables que le otorgan el sondeo encargado en diciembre por la propia formación –que le daría entre siete y ocho concejales, su máximo histórico, según avanzó ayer el Diari– el partido con sede en la calle Reial tiene previsto designar antes de Setmana Santa a Pau Ricomà como su candidato en la ciudad.
De esta forma, Ricomà afrontará su tercera campaña electoral como cabeza de cartel de los independentistas. La idea del partido que ostenta la alcaldía desde hace 32 meses es la de convocar a su asamblea de militantes entre finales de marzo y principios de abril para designar oficialmente a su número ‘1’. Esto sí, por lo que se refiere al resto de la candidatura, el proceso se dilatará hasta principios de 2023, que será cuando se hará pública la lista.
El alcalde –que es concejal desde 2015 y máximo representante municipal desde 2019– recibió ayer el espaldarazo del presidente de ERC, Oriol Junqueras, quien mostró su «pleno apoyo» al actual Primer Edil tarraconense durante una visita a la ciudad. A raíz de una ruta por la Plaça Corsini, Junqueras reveló que, hace semanas, las cúpulas de ERC y Catalunya en Comú «conversaron» sobre la aprobación de los presupuestos de Tarragona, en unas negociaciones que finalmente no llegaron a buen puerto por la negativa de la edil Carla Aguilar (ECP). «Pedimos responsabilidad y que los grupos que no están en el gobierno municipal trabajen para la ciudad», indicó Junqueras durante su charla con los comerciantes del Mercat Ambulant de Marxants. Por lo que se refiere al sondeo, Junqueras aseguró que «siempre mejoramos en las urnas lo que dicen las encuestas».
PSC: «Sondeo de partido sin más»
La publicación de ayer en este periódico del sondeo realizado entre 800 ciudadanos no dejó indiferente a ninguna formación, especialmente en el PSC. Según la encuesta encargada por Esquerra al Institut Opinòmetre, la formación socialista caería a una horquilla de entre 6 y 7 ediles, lo que le dificultaría la posibilidad de dar el sorpasso a Ricomà. «No nos la creemos. Es una encuesta de partido, filtrada interesadamente por el propio partido. No tiene más», afirmó ayer la portavoz municipal del PSC, Sandra Ramos, quien pese a reconocer que su formación «no tiene» ningún sondeo en la ciudad, afirma que los resultados del informe solicitado por ERC son «prometedores» para el grupo socialista. «Aún no tenemos ni candidato, estamos en la oposición y, pese a ser un sondeo de partido, nos da un empate técnico», recalcó ayer la número ‘2’ de Josep Fèlix Ballesteros en los últimos comicios locales.
De la encuesta se evidencia que Junts per Tarragona es el gran beneficiado del pacto de gobierno de junio de 2021, ya que según la encuesta se convertiría en la segunda fuerza del Saló de Plens. Pese a ello, es una incógnita saber si sus tres concejales –Dídac Nadal, Cristina Guzman y Elvira Vidal– seguirán el próximo mandato. «Somos independientes y representamos a dos corrientes (Junts per Catalunya y PDeCAT) que nunca se deberían haber separado», lamentó ayer la segunda teniente de alcalde, Cristina Guzman.
ECP destaca ser «consecuentes»
De los resultados avanzados ayer por el Diari sorprenden los 2-3 ediles que se esperan, respectivamente, para Cs y ECP. «Es una encuesta con poca objetividad. ERC solo tiene en la cabeza las Municipales en vez de centrarse en los problemas reales de la ciudadanía», lamenta Lorena de la Fuente (Cs). Por su parte, Carla Aguilar (ECP) recalca que, del sondeo, se extraería «una mayoría de izquierdas de entre 17 y 20 ediles» y, sobre el posible crecimiento de su coalición, considera que se debe al hecho de «ser consecuentes con nuestros ideales».
Eva Miguel (CUP) lamenta la posible entrada de Vox, que el sondeo le daría un edil. «Es indispensable blindar los grandes consensos y hacer un pacto antifascista para que todos los partidos se desmarquen de forma clara de una formación que alberga fascistas, neonazis y que añora la dictadura franquista», indica la cupaire. Aún ni están en la Plaça de la Font y los de Abascal ya aparecen a 15 meses de la cita con las urnas. La cuenta atrás ya ha empezado.
