El Ayuntamiento de Tarragona arranca el proceso para reabrir el histórico Mercat del Fòrum como una nueva Casa Cuadras de la Part Alta. Según ha podido saber el Diari, Mercats ya ha adjudicado la redacción del proyecto básico, que debe servir para empezar a perfilar cómo será el futuro recinto –cerrado desde 2008– para que se convierta en un espacio especializado en productos «kilómetro cero del territorio», según indica la presidenta de la empresa municipal de Mercats, Montse Adan (PSC).
La firma pública ya ha contratado al gabinete Lligams Estudi d’Arquitectura y a Maria Rius Ruiz –que son dos de las creadoras de la futura pérgola de la Plaça Corsini– para que lleven a cabo un primer esbozo para perfilar «la distribución y la funcionalidad del espacio», según detalla el gerente de Mercats, Dani Milà. La adjudicación se ha realizado mediante un contrato menor por valor de 14.788 euros más IVA.
El plan para este 2025 es tener listo este proyecto básico para que sirva de base para licitar la posterior redacción del proyecto ejecutivo, que este será ya el que definirá en 2026 la construcción, el refuerzo estructural necesario y las instalaciones, con la idea de que el espacio pueda abrir a mediados del 2027, al final del presente mandato municipal.
Se calcula que estas obras pueden suponer una inversión de 1,4 millones de euros. De momento, Mercats ya tiene 450.000 asegurados –el 32%–, en base a una subvención de la Diputació de 250.000 euros, además de otros 200.000 de recursos propios del consistorio aprobados a finales del 2024.

La parte de la Diputació debe justificarse y gastarse antes de la primavera del 2026. Por ello, la idea es usar este dinero para avanzar en los derribos de las paradas todavía montadas, el proyecto básico y los trabajos previos, y más adelante ya se gestionarán otras fuentes de financiación. «Negociaremos poderlos alargar», asegura el gerente en declaraciones a este periódico.
17 años cerrado
Este mes de abril, el Diari ha entrado en el antiguo mercado del Casc Antic junto a la presidenta y el gerente de Mercats. El espacio lleva 17 años abandonado y se encuentra en un evidente estado de degradación. Pese a ello, todavía hay ocho paradas en pie, como las de Llambrich, Vives, Mellado, Carme o Remei.
«Deberemos desmontarlas, ya que de lo contrario no habrá espacio. No descartamos dejar alguna para el recuerdo», indica Montse Adan, quien expresa su firme voluntad por «empezar a recuperar espacios para darles una nueva vida. Estamos aquí para hacer cosas», reivindica.
«Queremos reabrir espacios cerrados. Queremos una ciudad viva»
Montse Adan
Presidenta de Mercats
De hecho, en la parte del mercado que está a la altura de la Plaça del Fòrum –que es por donde se accederá– es la zona en la que está previsto llevar a cabo la divulgación de productos made in en la provincia de Tarragona, como el pescado, los calçots de Valls o las DO de vinos y aceites de la demarcación. En este punto también se organizarán show cookings, charlas o talleres «para poner de relieve la cocina de la demarcación, desde la compra hasta su elaboración: todo el proceso», recalca Adan.
El techo del Mercat se reforzó hace años, pero la gerencia de Mercats tiene claro que, cuando se afronte la inminente remodelación, deberá contarse con una nueva actuación. «Las vigas están un poco comidas, será necesario realizar algún tratamiento para reforzarlas», indica Dani Milà.

Ya en la planta inferior del recinto está previsto que se acomode un centro de interpretación de la gastronomía tarraconense, a la vez que se adapte para proyectar mappings y audiovisuales. «El principal objetivo es explicar la historia de Tarragona a través de la gastronomía», indica Dani Milà, quien reitera que el complejo no nace con la voluntad de ser un espacio destinado a los turistas. «Claro que habrá, como los hay en el Mercat Central, pero el proyecto está pensado para los ciudadanos de Tarragona», sostiene.
El nuevo Mercat del Fòrum también estará abierto para las entidades. «Estará a su disposición para que puedan organizar eventos, como presentaciones». Un espejo puede ser la reciente experiencia con los Premis Lladonosa que se organizaron a principios del pasado mes de abril en la Plaça Corsini con una gran afluencia de público.
«Una oferta complementaria»
En el interior del antiguo Mercat del Fòrum todavía puede apreciarse alguna botella de chartreuse, un calendario del año 2000, básculas en las paradas y sillas y restos de desmontajes todavía en el suelo. «Ahora está dejado, con carteles en la fachada... Queremos una ciudad viva. No será un proyecto que se eternice. No se paralizará, lo tiraremos adelante», reivindica la primera teniente de alcalde, después de que hace meses el emplazamiento pasara de estar adscrito al Àrea de Cultura –debía albergar una parte del Centre d’Art– a la de Comerç.

«No queremos ser un Mercado de San Miguel, sino generar una oferta complementaria para el comercio local, como una Casa Cuadradas», resalta la también primera teniente de alcalde, citando el histórico comercio que cerró en noviembre del 2019 tras un siglo de trayectoria en la Rambla Nova.
Ahora, el objetivo es que la reapertura del inmueble dentro de dos años cuente con un «calendario estable» de actividades, ya que de esta forma «los vecinos y los comercios del entorno podrán complementarse mejor». Después de permanecer en el olvido desde 2008, el histórico Mercat del Fòrum empieza a ver la luz al final del túnel.